El Chi o Ki o Prana, es la idea de la fuerza vital invisible, la energía, que gobierna tu salud, inherente a la Medicina Tradicional China, la Macrobiótica y el Ayurveda. Probablemente es la visión más amplia y magnífica de lo que la medicina occidental llama ATP, aunque esta no abarca un concepto tan amplio
La medicina china, ya en sus orígenes, observaba el Chi. Los curanderos de entonces ya concluyeron que si esa Energía era débil, se encontraba bloqueada o sufría un desequilibrio las posibilidades de desarrollar una enfermedad aumentaban. La Medicina Tradicional China o el Ayurveda y todas las ramas de la salud vinculadas a ellas, buscan equilibrar, desbloquear o fortalecer el Chi. Cuando se consigue que éste fluya correctamente se promueve la curación.
Pero ya sabes que “más vale prevenir que curar”, y mantener tu Chi en un fluir continuo y suave es lo mejor que puedes hacer para prevenir enfermedades y evitar la aparición de brotes de dermatitis o psoriasis. Para ello te recomiendo unas prácticas milenarias, meditaciones en movimiento, el Tai Chi y y el Qi Gong. A diferencia de otros ejercicios o deportes, estas artes de meditación populares, relajantes y en movimiento están diseñadas para ejercitar el Chi y mantenerlo fluyendo correctamente.
Cómo te sana el Chi
Nuestro Chi es la fuerza vital real que nos anima y alimenta nuestra reproducción y reparación celular. Contiene su propia inteligencia que actúa fuera de nuestra conciencia cotidiana. Por ejemplo, el Chi o fuerza vital en las células de tu hígado sabe cómo desintoxicar miles de sustancias químicas de tu torrente sanguíneo y puede hacerlo sin que tengas que pensar en ello para nada.
“Tu Chi conoce cada célula, cada órgano y toda la historia de tu cuerpo. Es el experto y motor de la regeneración y reparación. ¡Tiene más sabiduría curativa que la universidad médica más grande! Nuestra energía vital original está trabajando como nuestro médico principal cada segundo de cada día, tratando desesperadamente de equilibrar nuestro cuerpo y restaurar nuestra salud” (Waysun Liao)
Lo único que debes cuestionarte es si estás trabajando a favor o en contra de esa energía
Cómo te ayuda el Tai Chi y el Qi Gong
¿Has vista alguna vez un grupo de practicantes de Tai Chi en algún parque? A mi me reusta hechizante y mágico. Parece extraño y hermoso, pero ¿qué hace la práctica?
¿Qué es lo que consiguen?
Además de ofrecer una forma de ejercicio moderado suave, calmante y que alivia el estrés que puede brindar pequeños beneficios en la fuerza y la flexibilidad, el Tai Chi y el Qi Gong van un paso más allá: alientan y ayudan a que su Chi fluya por todo su cuerpo de una manera más natural y eficaz.
Los estudios de investigación muestran que el Tai Chi es efectivo para mejorar el equilibrio y prevenir caídas, mejorar la actividad inmunológica de las células T (sistema inmunitario), reducir los síntomas de la artritis, mejorar la salud cardiorrespiratoria y reducir los síntomas de la fibromialgia y el dolor crónico. Una revisión médica de Harvard una vez lo denominó «medicamento en movimiento». (1)
Lo mejor es que el Tai Chi y el Qi Gong son apropiados para personas de cualquier edad y nivel de condición física, e incluso se pueden realizar en una silla. Puedes aprender fácilmente algunos movimientos para practicar solo en casa o unirte a un grupo en tu comunidad. Para personas con dermatitis o psoriasis grave es genial, ya que no te hace sudar
El tai chi consiste en una serie de movimientos muy lentos o muy rápidos para ayudar a mover el chi del cuerpo. Las personas usan el tai chi como una manera de combinar la meditación y el movimiento, y de mejorar y mantener la salud. El qi gong implica movimientos diferentes que podrían realizarse en distinto orden.
Construye la conexión Chi
Tanto el Tai Chi como el Qi Gong te llevan a meditar sobre la sensación de tu cuerpo, la respiración el movimiento y aprender a sentir la fuerza vital que te recorre de un modo sutil.De este modo estas prácticas contribuyen a construir una conexión entre tu mente y tu Chi (Waysun Liao).
“Una vez que restauramos nuestra conexión interna con nuestra energía vital, o Chi, consciente o inconscientemente comenzamos a captar su señal. Nos encontramos tomando nuevas decisiones, anhelando diferentes alimentos, reorganizando lentamente nuestras vidas de maneras que de alguna manera nos hacen sentir mejor. Día a día empezamos a sentirnos mejor mentalmente y en nuestro cuerpo físico. Es una transformación que a veces es lenta y a veces rápida, pero el impulsor de ese cambio es nuestra propia energía vital, no un experto externo o una tendencia”, dice el Maestro Liao.
Ya sea que crea o no que nuestro Chi puede comunicarse con nosotros, la MTC y artes como el Tai Chi refuerzan la importancia de la conexión mente-cuerpo. Cuando tu Chi fluye y tu salud física mejora, también lo hacen tu mente, tu estado de ánimo y, en consecuencia, tu motivación y capacidad para seguir mejorando.
¿Ya te beneficias de alguna de las medicinas más antiguas del mundo?
2 respuestas
Gracias por la información, muy útil e interesante.
Muchas gracias por tu comentario, Pedro. Me alegra que te resulte interesante