Cansancio y dermatitis
Sanar tu dermatitis requiere de energía. Las mitocondrias son la parte de la célula encargada de generar esa energía. Si estás cansada tu piel lo va a tener más difícil. Hoy te cuento cómo aumentar tus niveles de energía para sanar tu piel
Encuentra tu tribu y sana tu piel
Tu piel es tu mayor órgano. Habla de ti, de las condiciones de tus órganos y de tu salud global. En ella puedes anticipar enfermedades y actuara tiempo. Tu piel te define y limita y/o te comunica con el exterior y te permite relacionarte con los demás.
En muchas enfermedades inflamatorias o autoinmunes de lapiel podemos encontrar detrás sentimientos de aislamiento, miedos ancestrales a entrar en contacto con lo desconocido, penas profundas de soledad. Y es que la piel es nuestro órgano social y desde ese punto deberíamos trabajar también para sanarla.
¿Probióticos para sanar tu piel?
En un estudio de 2018, El microbioma intestinal como el mayor regulador del eje intestino-piel (1) se vio que el intestino y la piel se comunican continuamente. Tu intestino puede reaccionar, por ejemplo, a ciertos componentes de tu dieta, desencadenando una respuesta inflamatoria que lleve a la dermatitis, el acné o la psoriasis.
Microbiota y piel sana
La microbiota es el conjunto de microorganismos que habitan tu intestino y, en general, todo tu cuerpo. La de la piel recibe el nombre de dermobiota.
En un estudio de 2018, El microbioma intestinal como el mayor regulador del eje intestino-piel (1) se vio que el intestino y la piel se comunican contínuamente. Tu intestino puede reaccionar, por ejemplo, a ciertos componentes de tu dieta, desencadenanado una respuesta inflamatoria que lleve a la dermatitis, el acné o la psoriasis.
Hoy te cuento lo que debes saber para que tu intestino y su piel tengan la mejor relación posible.
Omega 3 y omega 6 para proteger tu piel
Una piel sana necesita ácidos grasos esenciales omega-6 y omega-3.
Ya sea a través de la dieta, mediante la suplementación o la aplicación directa sobre la piel esto ácidos grasos ayudan a mantener la barrera de la piel, modulan la respuesta inflamatoria de la dermis y la epidermis, regulan el fotoenvejecimiento y el daño causado por la luz